Aunque sea uno de los mejores escaladores de Noruega, Thilo Schröter no atribuye sus títulos de campeón nacional ni sus éxitos al puro talento natural. Lo atribuye a su enorme motivación, algo que ha tenido desde que, con 10 años y recién llegado a Oslo, entró en el mayor rocódromo de la ciudad. La motivación no es del todo intrínseca: a Schröter le impulsan mucho las personas con las que escala. "Soy la peor persona para escalar solo". Le encanta el aspecto social del bloque, la resolución colectiva de problemas y compartir los éxitos de los demás, y de lo que está más orgulloso es de los bloques que ha establecido por todo Noruega. El esfuerzo que supone estudiar mapas, explorar posibles zonas, limpiar los bloques y preparar buenas recepciones, es su oportunidad de agradecer al deporte y a la comunidad lo que ha sido su principal fuente de energía en la vida. Schröter pone pasos de bloque en su rocódromo local y también entrena a “los chicos más motivados de Oslo” junto a su compañera Tina Johnsen Hafsaas, y fabrica sus propias presas de madera. Para hacer más cómodo su pequeño apartamento, que comparte con Johnsen Hafsaas, Schröter volcó sus dotes de carpintero en construir una oficina sobre una plataforma suspendida en el aire. ¿Quién iba a descansar en el suelo pudiendo estar en un lugar alto y precario? Desde luego, no Schröter, cuya facilidad para la gimnasia convierte el mundo entero en un patio de recreo.
Logros
- 8C en bloque (Spray of Light)
- 8 B en bloque al flash (Monkey Business y Nagual)
- Primera de Agnes Buen (9a)
- 4 veces campeón de Noruega
- 3 veces campeón nórdico